jueves, 12 de febrero de 2009

Libro con las canciones de Silvio.
Por: Lázaro Sarmiento

Al abrir el volumen titulado Cancionero. Silvio Rodríguez (Letras Cubanas-Ojalá, 2008), que recoge en una magnífica edición los textos de sus canciones , así como una selección de fotos, pienso que quizás de ningún otro intérprete ni compositor he escuchado tantas melodías durante mi vida. Pero esta observación carecería de significado sino fuera por la circunstancia de que esas páginas de Silvio han establecido un diálogo inteligente, poético y honesto con su época, la revolución , el amor, la ternura y la realidad con sus caras, blanda o dura. En este diálogo nos hemos recreado todos.

Recuerdo que cuando comencé a sintonizar por primera vez los programas de radio con el interés de conocer como estaban construidos para luego imaginar que era yo quien los realizaba, descubrí un espacio de media hora en la mañana del domingo por Radio Liberación. Aquel programa estaba dedicado a los trovadores cubanos de varias generaciones. Comenzaba y finalizaba con una página que Silvio Rodríguez había compuesto en 1967: La canción de la Trova..


Aunque las cosas cambien de color,
no importa pase el tiempo
Las cosas suelen transformarse
siempre, al caminar.
(…)
Pues, siempre que se cante con el corazón,
habrá un sentido atento para la emoción de ver
que la guitarra es la guitarra,
sin envejecer.
Recorro las páginas de Cancionero. Silvio Rodríguez como quien sigue una cronología de emociones, donde se mezclan los recuerdos personales con las metáforas del compositor. Esos textos han iluminado zonas íntimas y colectivas de los cubanos (y también de muchos terrícolas en el mundo) durante los últimos cuarenta años. Un tiempo muy largo que ha mantenido intacto el prestigio del trovador.

martes, 10 de febrero de 2009

El cuento cubano en los últimos 50 años.
Comienza con un texto de Guillermo Cabrera Infante y finaliza con uno de Jorge Enrique Dávila. Estoy refiriéndome a la antología La ínsula fabulante. El cuento cubano en la Revolución (1959-2008). Selección y prólogo de Alberto Garrandés. El volumen forma parte de la colección 50 Aniversario del Triunfo de la Revolución, concebida por el Instituto Cubano del Libro.
Sin lugar a dudas este título es uno de los platos fuertes de la Feria del Libro Cuba 2009. Como amante de la literatura lo considero una delicia que suscitará el interés y el placer de los lectores del género. Y seguramente provocará también algunos comentarios extraliterarios en escenarios fuera de la Isla. La antología incluye autores que, por diversas causas, no han figurado en los catálogos de las editoriales cubanas en las últimas décadas, como José Lorenzo Fuentes, Antonio Benítez Rojo, Norberto Fuentes, Reinaldo Arenas, Carlos Victoria y el ya citado Cabrera Infante.
Este último dato no es lo que hace valiosa esta antología de cuentos pero si subraya la amplitud de criterios con la que se hizo la selección . La ínsula fabulante constituye una muestra de la pujanza del género en nuestro país desde 1959 hasta el momento actual. En total 66 autores, 66 narraciones breves.

lunes, 9 de febrero de 2009

VIDA PRIVADA.
Probablemente esperan a que todos estén durmiendo en la casa para desarrollar sus propias fantasías. Pensé que algunos objetos cercanos a mi computadora pudieran estar en el blog.

Acabo de descubrir que hay una página dedicada a la vida privada de los juguetes. (The Private Lives of Your Fav) El sitio sostiene la idea de que, cuando no son observados, los juguetes realizan actividades y se comunican entre ellos, tienen su propia vida.

VIDA PRIVADA.
Tal vez secretamente, durante la noche, este coche-radio traslade a Bette Davis.
Enlace: http://ffffound.com/image/6134202214cf84323c7c61070e49871077f73345?c=2406639

domingo, 8 de febrero de 2009


Desfile de vedettes.


Por: Lázaro Sarmiento

Cuentos del Alhambra es un documental de Manuel Octavio Gómez realizado en 1963. Recientemente lo transmitieron por televisión y quedé sorprendido por su concepción, estilo visual, diálogos, montaje de las entrevistas y manejo de la información. Ya quisieran algunos documentales actuales parecerse a esta obra que tiene más de 45 años y proyecta un delicioso encanto histórico y artístico. Es una lástima que el tiempo haya dañado algunos fragmentos de la banda sonora, principalmente en los minutos iniciales cuando Rosita Fornés, entonces en su esplendor físico y escénico, presenta el homenaje a las antiguas glorias del teatro Alhambra.

Y delante de los espectadores pasan los rostros envejecidos de Blanquita Becerra, Amalia Sorg, María Pardo, Luz Gil…Antiguas reinas de “un teatro para hombres solamente…que lo vio todo el mundo.” Ubicado en la esquina de las calles habaneras de Consulado y Virtudes, el elenco del Alhambra también organizaba presentaciones para un público familiar en otros teatros de la capital o del interior del país.

Una de las mujeres que aparecen en el documental, Amalia Sorg, inspiró a Miguel Barnet su novela testimonio Canción de Rachel. El escritor ha dicho que de todas las vedettes del Teatro Alhambra, ella era la más sensual, la más sicalíptica: “La conocí de 88 años, en 1969. Se ponía unos tacones muy altos, pelucas, maquillaje exagerado. Me enamoré de ella, un amor platónico, y ella de mí, no tan platónicamente .”


Luego el director Enrique Pineda llevaba la novela al cine con el título de La bella del Alhambra (Beatriz Valdés), un filme que conquistó al público. La última estrella en representar en el teatro a la vedette de Canción de Rachel es la cubana radicada en México Niurka Marcos. Barnet viajó a Ciudad México en el 2005 para presenciar la puesta en escena en el teatro Fru Fru de la versión de su libro. Allí declaró: "Rachel es Ninón Sevilla, María Antonieta Pons, Irma Serrano, Rosita Fornés, Tongolele, Edith González, Niurka. Las grandes vedettes que han trabajado en el cine, en el teatro, a veces haciendo concesiones, a veces en teatros de cuarta categoría y otras veces en teatros de primera.”



En esa ocasión le preguntaron a Barnet ¿qué es una vedette?: “ Una artista, una fantasía colectiva, un objeto sexual, quintaesencia del glamour, marioneta de los hombres, un momento de alegría, una leyenda negra y también rosa, rehén de su belleza, una vida deshilachada, un mito contemporáneo.”

Es una suerte que existan los testimonios de aquellas antiguas vedettes recogidos en el documental Cuentos del Alhambra y en el libro Canción de Rachel, de Miguel Barnet.

sábado, 7 de febrero de 2009

MIS PRIMEROS VIAJES POR LOS OCEANOS.


Por: Lázaro Sarmiento

Existían entonces dos capitales alemanas: Bonn y Berlín. Etiopía era un imperio y Zanzíbar un protectorado británico. Angola aparecía como provincia portuguesa de Ultramar. Las fronteras y los colores de los mapas no eran lo que son en la actualidad. Y en aquel mundo se mencionaba una Cortina de Hierro que, decían, dividía a Europa en dos zonas diferentes, no por la geografía sino por la política: el Este y el Oeste. La primera vez que encontré la metálica cortina fue en un número de Selecciones del Reader’a Digest. Ejemplares de esa publicación con más de una década de antigüedad se comercializaban en unas librerías de viejo que estuvieron frente al cine Moderno hasta 1968, el año de la Ofensiva Revolucionaria.

Hoy estuve pensando en los libros que me acompañan desde hace muchísimo tiempo. Quizás el primer libro que compré en mi vida ( que yo recuerde ) por mi propia iniciativa, siendo niño, fue el Atlas Geográfico Mundial de Bolsillo, elaborado e impreso especialmente para Cuba en Praga, Checoslovaquia, en el año 1963. Lo descubrí poco tiempo después de publicado, entre los libros que cada día colocaban en una carretilla de ventas a la entrada de la clínica La Benéfica, a unas cuadras de donde yo vivía en Luyanó.

Con este Atlas aprendí la altura del Everest, el tamaño de Groenlandia y la ubicación de Katmandú. Y luego los novios de mis tías, que eran marineros y viajaban en barcos de la Flota Cubana de Pesca, trazaban con las puntas de sus dedos sobre el color azul las rutas oceánicas que recorrían hasta los bancos de peces cerca de Terranova.

Muchas de las fronteras del Atlas Geográfico Mundial de Bolsillo cambiaron drásticamente desde que acaricié por primera vez sus mapas y soñé recorrer sus ciudades. Me resulta cómodo pensar que ni el libro ni los recuerdos han envejecido sino que el mundo se ha rejuvenecido.

ecoestadistica.com