Mostrando entradas con la etiqueta exhibición. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta exhibición. Mostrar todas las entradas

domingo, 1 de noviembre de 2009

NOSTALGIA DE LAS CIGUEÑAS RUSAS.


Por: Lázaro Sarmiento

Tengo dos amigos que sienten nostalgia de la época en que las películas rusas (antes soviéticas) eran frecuentes en las salas de la Isla. Ellos descubrieron esta filmografía durante una jornada de cine de la antigua URSS organizada en Cuba en los primeros tiempos de la Revolución. Fueron dos semanas de proyecciones en el teatro Estrada Palma (hoy García Lorca) de La Habana en febrero de 1960. Allí vieron por primera vez El acorazado Potiomkin, Chapayev y Cuando vuelan las cigüeñas.

En las décadas siguientes hasta el derrumbe de la Unión Soviética, los espectadores cubanos nos relacionamos estrechamente con una cinematografía de un aliento artístico diferente y de indiscutibles valores humanistas. Con el tiempo necesitó renovarse, traspasar los límites y adaptarse a un mundo que cambiaba a una velocidad de montaña rusa. Su historia fue condensada y bien contada por la ucraniana Zoia Barash en el libro El cine soviético del principio al fin (Ediciones ICAIC, 2008). Zoia trabaja en nuestro país desde el año 1963 y en la Cinemateca de Cuba llegó a ser especialista de cine de los países socialistas europeos.

Por los días en que mis amigos acudían a las funciones del Estrada Palma, el escritor Guillermo Cabrera Infante, el Caín de las críticas cinematográficas, publicó en el periódico Revolución:


“Resulta curioso anotar que el cine a observar con atención en los próximos en los próximos cinco años sea el cine soviético. Como la Nueva Ola francesa en sus comienzos de hace tres años (Vadim: Y Dios creó la mujer) los indicios son apenas trazos: la muerte de un personaje resuelta por un piano, una tormenta y un sauce llorón; la violación de una muchacha en medio de un bombardeo fulgurante; un amante muerto por su amante entre el estruendo de las olas: Shakespeare, Dostoievski y Cía. Por supuesto que serán dos cines esencialmente diferentes, pero como los jóvenes directores franceses, los jóvenes directores rusos representan el único fenómeno naciente del cine actual.” (13 de marzo de 1960)

Casi cincuenta años después, en la última decena de octubre, se presentó en la sala Chaplin del Vedado una Semana de cine ruso, luego de una larga ausencia en las carteleras de aquí. Me encontré con mis amigos a la salida de la proyección de Somos del futuro, obra realizada en el 2008. Comentamos sobre las condiciones en las que deben trabajar ahora los directores en Rusia y las señales de recuperación de su industria fílmica (unas 100 producciones al año).

Cité al actor ruso Boris Galkin, de visita entre nosotros, quien lamentaba que en Rusia en la actualidad el 75 por ciento de los filmes exhibidos en las salas de cine corresponde a películas norteamericanas. Él dijo a la prensa que “ninguno de los títulos de la muestra clasificaba como filmes comerciales al estilo de Hollywood.”

Mis interlocutores recordaron la belleza conmovedora de Tatiana Samoilova medio siglo atrás, sus ojos orientales, y su llanto en silencio al reconocer que el novio había muerto. Las nueve películas rusas proyectadas en La Habana no disminuyeron la nostalgia que mis amigos sienten por Cuando vuelan las cigüeñas.

Luego, regresaron a su casa a enfrentarse en televisión a los autos, la sangre y el erotismo distorsionado de la Película del Sábado.

Arriba: Fotograma de la cinta Cuando vuelas las cigüeñas. (Letiat Zhuravli) Dirección:Mikheil Kalatozov. Reparto:Tatiana Samoilova, Alexei Batalov.Año:1957.Abajo: Estreno de Cleopatra en Hollywood., 1963 Foto de Barry Feinstein .


ecoestadistica.com