Por: Lázaro Sarmiento
En esta casa en la calle Tejadillo se venden antigüedades. Los viejos anuncios de Coca Cola, que en una época estuvieron en calles y en las paredes de bodegas y cafeterías, constituyen una de las principales ofertas. Me gustaría llevarme algunas de las cosas exhibidas en esta sala habanera pero el bolsillo y las pautas del minimalismo lo impiden.
San Lázaro es uno de los santos más venerados en Cuba. Este joven cumple una promesa de vestirse con prendas de fibra de saco y empujar descalzo una carretilla con la imagen del santo por las calles de La Habana Vieja. Aquí hace una parada en el Café Luz de la calle Obispo. Cada 17 de diciembre se produce la apoteosis de la adoración a San Lázaro con masivas peregrinaciones hasta el sanatorio del Rincón, en las afueras de la capital.
Es probable que las antiguas taquillas del balcony del cine Actualidades de La Habana nunca vuelvan a prestar servicio. Hasta hace muy poco tiempo el Actualidades era el cine en funciones más antiguo de Cuba (algunos dicen de América Latina) pero ya estas ventanilla no se usaban. Desde el pasado año el local está cerrado.
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Lázaro, gracias por permitirnos de nuevo viajar La Habana y sus pintorescas viñetas contigo. Yo también tuve que cumplir una promesa a San Lázaro hecha por mi madre cuando era niño. Por un año entero, todos los miércoles, me tenía que poner un pantalón de saco que picaba horriblemente, hasta que en la tercera semana mi pobre madre se compadeció y los mandó a forrar con tela de "saquito de harina". Después de eso no picaban, pero el calor era irresistible y llegaba a la casa todo sudado y de mal genio... Cosas de las tradiciones y las creencias... Abrazos :)
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