Por: Lázaro Sarmiento
Estas fotos son resultado de un recorrido con aire detectivesco por el reparto Cubanacán , antes Country Club, en La Habana. El objetivo de mi cámara era una de las mejores residencias construidas en este lugar de suaves colinas y exuberante vegetación: la mansión de Laura Gómez Tarafa, Chinie, quien fuera una de las herederas más ricas de Cuba.
Las casas de esta zona al oeste de La Habana fueron edificadas antes de 1959 por familias de la burguesía cubana que durante el siglo veinte se alejaron del centro de la capital. Después de la Revolución casi la totalidad de los dueños de los aristocráticos inmuebles abandonaron la Isla. Solo unas cuantas familias que vivían en el Country permanecieron aquí. En ese reducido número estaba Laura Gómez Tarafa, cuya vivienda en la actualidad tiene por vecinos varias sedes diplomáticas e instalaciones sociales.
En Los Propietarios de Cuba 1958 (Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 2006) Laura Gómez Tarafa figura como “propietaria en 1 ferrocarril, 1 fábrica de abono y varios inmuebles.” También socia propietaria de la Plaza del Vapor.
Chinie Tarafa fue entrevistada en el año 1994 por Marjorie Moore y Adrienne Hunter para el libro Siete mujeres y la Revolución Cubana (Ciencias Sociales, 2003). La obra recoge los testimonios de siete mujeres de la alta burguesía cubana que decidieron quedarse después del triunfo revolucionario, dando a conocer por qué tomaron esa decisión y otros aspectos de sus vidas.
“Lo que digo es que he vivido muy bien y, por lo tanto, ¿por qué ir a buscar cualquier cosa en otra parte. Cuando uno sale de su país, siempre es un extranjero.
“Este es mi país. Mi abuelo luchó por él y lo tenemos todo aquí. Así que, ¿por qué irme? ¿Por qué tenemos un Gobierno comunista? Lo respeto y eso es todo. Pero yo soy tan cubana como cualquier otra. Ese es mi sentimiento. ¿Por qué salir huyendo?”
Gran Boulevard (antigua denominación) no. 2123 entre 4ta y Entrada, Country Club. La casa está enclavada en un terreno de 10 mil metros cuadrados. La casa ocupa 852 metros cuadrados. Fue construida en 1953. El arquitecto fue Rafael de Cárdenas. En una ocasión, un embajador le ofreció a Chinie comprarla en 5 millones de dólares “si estuviera dispuesta a venderla”.En la citada entrevista, ella precisaba: “Los pisos son de Botticino italiano, los baños son de mármol, hasta el techo; las maderas son de la mejor calidad, y está en perfectas condiciones…”
Estas fotos son resultado de un recorrido con aire detectivesco por el reparto Cubanacán , antes Country Club, en La Habana. El objetivo de mi cámara era una de las mejores residencias construidas en este lugar de suaves colinas y exuberante vegetación: la mansión de Laura Gómez Tarafa, Chinie, quien fuera una de las herederas más ricas de Cuba.
Las casas de esta zona al oeste de La Habana fueron edificadas antes de 1959 por familias de la burguesía cubana que durante el siglo veinte se alejaron del centro de la capital. Después de la Revolución casi la totalidad de los dueños de los aristocráticos inmuebles abandonaron la Isla. Solo unas cuantas familias que vivían en el Country permanecieron aquí. En ese reducido número estaba Laura Gómez Tarafa, cuya vivienda en la actualidad tiene por vecinos varias sedes diplomáticas e instalaciones sociales.
En Los Propietarios de Cuba 1958 (Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 2006) Laura Gómez Tarafa figura como “propietaria en 1 ferrocarril, 1 fábrica de abono y varios inmuebles.” También socia propietaria de la Plaza del Vapor.
Chinie Tarafa fue entrevistada en el año 1994 por Marjorie Moore y Adrienne Hunter para el libro Siete mujeres y la Revolución Cubana (Ciencias Sociales, 2003). La obra recoge los testimonios de siete mujeres de la alta burguesía cubana que decidieron quedarse después del triunfo revolucionario, dando a conocer por qué tomaron esa decisión y otros aspectos de sus vidas.
“Lo que digo es que he vivido muy bien y, por lo tanto, ¿por qué ir a buscar cualquier cosa en otra parte. Cuando uno sale de su país, siempre es un extranjero.
“Este es mi país. Mi abuelo luchó por él y lo tenemos todo aquí. Así que, ¿por qué irme? ¿Por qué tenemos un Gobierno comunista? Lo respeto y eso es todo. Pero yo soy tan cubana como cualquier otra. Ese es mi sentimiento. ¿Por qué salir huyendo?”
Gran Boulevard (antigua denominación) no. 2123 entre 4ta y Entrada, Country Club. La casa está enclavada en un terreno de 10 mil metros cuadrados. La casa ocupa 852 metros cuadrados. Fue construida en 1953. El arquitecto fue Rafael de Cárdenas. En una ocasión, un embajador le ofreció a Chinie comprarla en 5 millones de dólares “si estuviera dispuesta a venderla”.En la citada entrevista, ella precisaba: “Los pisos son de Botticino italiano, los baños son de mármol, hasta el techo; las maderas son de la mejor calidad, y está en perfectas condiciones…”
Hermosa Cuba! Saludos Lázaro.
ResponderEliminarComo siempre instruyendo con tu blog, Lazarito. Siempre aprendemos y conocemos algo nuevo de la historia de nuestra ciudad y de sus personajes.Felicitaciones.Mayra
ResponderEliminarLazaro, si la señora Chinie Tarafa murió ¿quién heredó la casa? Le doy las gracias adelantadas en caso de que pueda responderme.
ResponderEliminarAunque no soy un especialista en el tema, el jardinero de una instalación vecina me comentó que el actual propietario de la casa es un nieto de Chinie Tarafa.
ResponderEliminarMayra Cecilia, es un placer para este blog contar con sus visitas. Gracias y saludos.
ResponderEliminarOjala mantenga todo ese patrimonio en buen estado,vale la pena conservarlo,son las raices de una nacion.
ResponderEliminarHola Lázaro,
ResponderEliminarQuería adicionar a la información que aportas sobre la señora Tarafa, que ademas de ser la primera compradora de Cubalse( compraba al por mayor para llenar el frigorífico o sótano de igual dimensión que la casa), poseía también la cuarta parte de las acciones de La Coca Cola.Supongo que su nieto,que estudiaba en Canadá, sea su único y actual heredero. Aun recuerdo los 4 o 5 coches de lujo que siempre estaban aparcados en la entrada de la puerta principal.Saludos.
Acabo de leer el libro 7 mujeres y la Revolución Cubana, impresionante la vida de esta señora, y su mansión también, sin embargo,más impresionante es el amor a sus raíces que a veces se nos olvidan.Con una mansión así, o sin ella, es cierto que el pedacito de uno hala fuerte.
ResponderEliminarla casa es muy bella yo nací frente esa casa la derrumbaron para construir el palacio de convenciones la casa tuvo varios dueños después de la revolución fue de la escuela nacional de artes …ahora no se pero por dentro era una maravilla lámparas de lagrimas pisos de mármol closets de madera preciosas y un baño en su segundo piso con yacusis con pasamanos de cristal detrás cancha de tenis parques con muchos árboles frutales
ResponderEliminarEl coronel Tarafa del ejercito mambi al acabar la guerra contra españa se quedo cercando a lo salvaje oeste las haciendas de las familias camagueyanas del patriciado cubano que renunciaron a todo por la independencia y que despues de la guerra debido a la llamada tea incendiaria no pudieron recuperar sus propiedades.como siempre en todos lados los mas bandidos siempre ganan, pobre de los cespedes, aguileras, aldamas y agramontes
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